viernes, diciembre 21, 2007

#51

Me lo mandó alguien. Creo que eran sus deberes.

* * * *

- No esperarás que encima te ayude con eso, ¿verdad?

Me lo dices mientras me miras con el ceño fruncido. Tampoco demasiado. Puedo notar el frío en tu piel a pesar de la escasa luz. Habría dejado lo que me traía entre manos y te hubiera abrazado para darte calor si supiera que eso iba a gustarte. Pero llevamos una botella y media de vino encima y casi cuatrocientos segundos en la misma postura. Me asusta la idea de que puedas empezar a aburrirte y eso hace que mi erección mengüe notablemente.

- No. Un trato es un trato- te digo sin querer creerme mis propias palabras.

Pienso en darte las gracias por lo que estás haciendo, pero sé que es una estupidez. Lo haces porque quieres. Es surrealista y es confuso, sí, pero sigo masturbándome sin poder apartar la mirada de tus ojos. Estoy tumbado en la cama, recostado en el cabecero. Tú frente a mí a cuarenta centímetros, sentada de rodillas y ataviada con un tanga gris y un top del mismo color. Intencionadamente decides separar un poco las piernas. No sé en qué momento decidiste ayudarme con esto y ahora mismo noto cómo mi polla se va empapando por la excitación. Resoplo. Sonríes como alguien que ve luz al final de un túnel.

- Parece que por fin vas entrando en calor. Y yo tengo frío –dices mientras echas mano de mi camisa y te la pones por encima. Ladeas la cabeza y miras cómo muevo la mano. –Me parece alucinante la técnica que tenéis los tíos para esto. Pero yo lo hago mejor, la verdad.

Tu frase me descoloca. No sé si por tenerte tan cerca o por el puto alcohol, pero no consigo concentrarme y terminar. Pasan otros 300 segundos en silencio.

- Anda, déjame ayudarte o estaremos aquí toda la noche.
- No. Que tenemos un trato.
- A tomar por culo el trato. Quiero hacértelo yo, idiota.

Después de tantos días sin eyacular no necesito mucho más para correrme en tu mano, despacio, en un largo orgasmo.

Me gustas tanto…

2 observaciones suspicaces:

Anónimo dijo...

¡joder cómo mola!

A ver si mañana hago los deberes...

Anónimo dijo...

Qué trato más inocente.